La pieza audiovisual, que muestra imágenes aéreas de la costa marplatense, desató todo tipo de especulaciones entre sus fanáticos.
Los verdaderos hombres, por lo tanto, y, desmesura de un orgullo heroico, elegidos de los dioses, marcados con el sello de lo divino, ellos que también se dicen los jeguakáva, los adornados.